No te pierdas estos ricos vasitos de lasaña
No te pierdas estos ricos vasitos de lasaña y aprovecha una forma original de comer este tradicional plato. Anota los pasos de la receta.
Lasaña de mezcla de quesos
Lasaña de rape con marisco
Lasaña de cordero
La lasaña es un plato típico de la cocina italiana, de origen bastante antiguo. Se dice que Cicerón adoraba estas láminas largas de pasta, lo que da una idea del tiempo que tiene este plato. Sin duda, es una de las preparaciones italianas más reinterpretadas y adaptadas a los tiempos, y consiste en intercalar láminas de lasaña con diversas salsas e ingredientes. Los vasitos de lasaña son, precisamente, una forma original de reelaborar esta receta tan tradicional.
Para hacer estos vasitos se utilizan las láminas precocidas de lasaña, que se enrollan, se rellenan y se hornean. Es muy fácil de preparar, aunque puede resultar un poco laboriosa, por el tema de rellenar las láminas y cortarlas sin que se convierta en un desastre. Lo recomendable es cocer un poco las láminas (aunque ya sean precocidas), para poderlas cortar bien y que no se rompan.
Conviene tener preparada de antemano la salsa de carne, pero su preparación no debe quedar muy líquida. Otro consejo: cuando se cuezan las láminas estas deben quedar casi al dente, pues habrá que meterlas al horno y allí se terminarán de cocinar.
Ingredientes:
Instrucciones:
- Precalentar el horno a 180 grados.
- Calentar el aceite de oliva en una sartén a fuego medio.
- Agregar la cebolla y el ajo y cocinar hasta que estén suaves.
- Echar la carne picada y cocinar hasta que esté cocida.
- Agregar el tomate triturado, la sal, la pimienta y el orégano.
- Mezclar bien.
- Retirar del fuego y dejar enfriar.
- Engrasar 8 vasitos individuales con aceite de oliva.
- Colocar una hoja de lasaña en cada vasito.
- Agregar la mezcla de carne y tomate y cubrir con queso mozzarella rallado.
- Repetir los pasos 8 y 9 hasta llenar los vasitos. Terminar la parte de arriba con una pequeña lámina de pasta, antes de echar el queso que se va a gratinar.
- Espolvorear con queso parmesano y cubrir con papel aluminio.
- Cocinar los vasitos en el horno precalentado durante 15 minutos.
- Retirar del horno y dejar enfriar antes de servir.
Puedes rellenar las láminas de literalmente cualquier ingrediente que te guste, siempre y cuando no tenga una salsa excesivamente liquida, para que no se cuele por debajo.
Por ejemplo, puedes hacer un guiso de pollo, o de verduras, que siempre resultan perfectas para combinar con la pasta. En todas estas versiones te aseguramos el éxito con todos los comensales, desde los más pequeños hasta los que tienen más años. Son un aperitivo muy divertido.